Jesús mío, Amor infinito que colmas nuestras almas,
Señor mío Jesucristo, Rey de la Gloria,
triunfador del pecado y de la muerte,
que en unión del Padre y del Espíritu Santo
en todo tiempo existes, en todo lugar estás
para hacer que nuestras vidas sean más fáciles y dichosas,
Señor mío Jesucristo, Rey de la Gloria,
triunfador del pecado y de la muerte,
que en unión del Padre y del Espíritu Santo
en todo tiempo existes, en todo lugar estás
para hacer que nuestras vidas sean más fáciles y dichosas,
ven a mí, llena mi corazón de humildad y de pureza
para poder ser digno de tu enorme sacrificio,
fortalece mi cuerpo y espíritu con tu piadosa mirada,
dame descanso y sostenme fuertemente en tus brazos,
Yo ....... con amor, con gratitud y fervor,
hoy elevo esta oración y suplicas a los Cielos
en memoria de tu Pasión y de tu muerte
hoy me entrego a Ti y en Ti busco refugio seguro.
hoy me entrego a Ti y en Ti busco refugio seguro.
Mi Señor Jesús crucificado, ¡glorificado seas!
Jesús mío crucificado, afligido Señor mío,
quiero tener siempre presente en mi mente y en mi corazón
el recuerdo de tu cruel y dolorosísima Pasión,
que sienta dentro de mí las penas de tu Divino Corazón;
es más, haz que sienta que se me rompe el corazón
por el arrepentimiento de haberte ofendido, mi Señor.
Divino Redentor y Padre mío Jesús, mi amigo y protector,
Soberano Maestro de humildad y abatimiento,
Señor mío Jesucristo, por aquellas cinco Llagas
que por nuestro amor recibiste en la Cruz,
socorre a tus siervos redimidos con tu preciosísima Sangre;
en la Llaga del costado, mi Dios y Señor,
yo quisiera entrar y beber de tu Sangre
para no pecar más ni olvidarme de Ti jamás. Amén.
mi buen Nazareno, ¡bendito seas porque me amas!
bendito seas porque siempre estás pensando en los hombres
y en la forma de enriquecernos con tus dones y favores.
En mi desconsuelo llego humildemente ante Ti,
bendito seas porque siempre estás pensando en los hombres
y en la forma de enriquecernos con tus dones y favores.
En mi desconsuelo llego humildemente ante Ti,
que eres caudaloso manantial de sanación y de vida,
y poderosa y eterna fuente de nuestra Resurrección,
que eres recinto luminoso de la Luz Divina,
alimento para nuestras almas en la Sagrada Eucaristía,
y nuestra única esperanza y salvación,
yo ....... con todo mi amor inclino mi corazón y mi ser
ante la gloria de tu Majestad y te pido no me dejes caer,
en tus manos dejo mis más angustiosas necesidades,
a Ti te confío mis adversidades y lo que me hace padecer
buscando me envíes desde tu Casa Celestial
el remedio que necesito en este duro trance:
(ahora di el problema o lo que te aflige
y pide con inmensa fe lo que deseas conseguir).
Misericordia Jesús, misericordia Señor,
en tus manos dejo mis más angustiosas necesidades,
a Ti te confío mis adversidades y lo que me hace padecer
buscando me envíes desde tu Casa Celestial
el remedio que necesito en este duro trance:
(ahora di el problema o lo que te aflige
y pide con inmensa fe lo que deseas conseguir).
Misericordia Jesús, misericordia Señor,
mira con ternura y compasión mi alma
y derramando tu amor en ella, bendíceme,
mira mis penas y sufrimientos y auxíliame.
Mi Señor Jesús crucificado,
alabo tu Cruz y tu Pasión, tu muerte y tu resurrección
y te doy las gracias, Rey del Cielo y de la tierra,
porque quisiste sufrir como hombre toda opresión,
toda calamidad, desventura, dolor y tortura,
para ser nuestro compañero en el sufrimiento,
nuestro auxilio en la necesidad,
para ser el consuelo de todos en la tristeza y adversidad,
yo ....... mi amado y dulce Jesús te pido:
(repetir la petición con mucha fe y esperanza).
Misericordia Jesús, misericordia Señor,
y derramando tu amor en ella, bendíceme,
mira mis penas y sufrimientos y auxíliame.
Mi Señor Jesús crucificado,
alabo tu Cruz y tu Pasión, tu muerte y tu resurrección
y te doy las gracias, Rey del Cielo y de la tierra,
porque quisiste sufrir como hombre toda opresión,
toda calamidad, desventura, dolor y tortura,
para ser nuestro compañero en el sufrimiento,
nuestro auxilio en la necesidad,
para ser el consuelo de todos en la tristeza y adversidad,
yo ....... mi amado y dulce Jesús te pido:
(repetir la petición con mucha fe y esperanza).
Misericordia Jesús, misericordia Señor,
mira mis padecimientos y socórreme,
aleja de mí la enfermedad, el desamor y la pobreza,
Tú eres quien puede reconfortarme en mis infortunios,
Tú puedes darme la sanidad, la paz y la tranquilidad
Tú puedes hacer que llegue a mí todo lo que tanto ansío.
Mi Señor Jesús crucificado, mi dulce bien,
mientras que delante de tu Cruz me arrodillo humildemente
y con gran amor y verdadera compasión
contemplo tu cuerpo azotado, llagado y traspasado,
quiero suplicarte permanezcas siempre a mi lado,
pues mi fortaleza esa en Ti Señor,
mi esperanza está en Ti
dirige tu gracia sobre mí, bueno y caritativo Jesús,
líbrame de todo lo que me perturba y no te alejes de mí.
Tú que nos pediste que no dejáramos de orar y nos dijiste:
"yo soy el camino al Padre, vuestro proveedor,
yo soy vuestra Luz en la oscuridad, no dudéis de mi amor"
ten misericordia de mí buen Jesús, ten misericordia Señor,
que tu milagroso poder me envuelva y auxilie,
que la belleza de tu doctrina sea quien me guíe
y tu ejemplo engrandezca mi vida espiritual.
aleja de mí la enfermedad, el desamor y la pobreza,
Tú eres quien puede reconfortarme en mis infortunios,
Tú puedes darme la sanidad, la paz y la tranquilidad
Tú puedes hacer que llegue a mí todo lo que tanto ansío.
Mi Señor Jesús crucificado, mi dulce bien,
mientras que delante de tu Cruz me arrodillo humildemente
y con gran amor y verdadera compasión
contemplo tu cuerpo azotado, llagado y traspasado,
quiero suplicarte permanezcas siempre a mi lado,
pues mi fortaleza esa en Ti Señor,
mi esperanza está en Ti
dirige tu gracia sobre mí, bueno y caritativo Jesús,
líbrame de todo lo que me perturba y no te alejes de mí.
Tú que nos pediste que no dejáramos de orar y nos dijiste:
"yo soy el camino al Padre, vuestro proveedor,
yo soy vuestra Luz en la oscuridad, no dudéis de mi amor"
ten misericordia de mí buen Jesús, ten misericordia Señor,
que tu milagroso poder me envuelva y auxilie,
que la belleza de tu doctrina sea quien me guíe
y tu ejemplo engrandezca mi vida espiritual.
Jesús mío crucificado, afligido Señor mío,
quiero tener siempre presente en mi mente y en mi corazón
el recuerdo de tu cruel y dolorosísima Pasión,
que sienta dentro de mí las penas de tu Divino Corazón;
es más, haz que sienta que se me rompe el corazón
por el arrepentimiento de haberte ofendido, mi Señor.
Divino Redentor y Padre mío Jesús, mi amigo y protector,
Soberano Maestro de humildad y abatimiento,
Tú que desde la Cruz nos muestras tus brazos abiertos
y nos brindas a diario tu Caridad, tu Luz y Verdad,
haz que yo ....... te sirva con humildad de corazón,
con tu gracia condúceme por la senda de tus Palabras
para que no cese de hacer obras agradables a Ti
que reinas en las Alturas por los siglos de los siglos.
Así sea, así se cumpla lo que te pido mi buen Jesús. +
haz que yo ....... te sirva con humildad de corazón,
con tu gracia condúceme por la senda de tus Palabras
para que no cese de hacer obras agradables a Ti
que reinas en las Alturas por los siglos de los siglos.
Así sea, así se cumpla lo que te pido mi buen Jesús. +
Reza con mucho fervor cinco Padrenuestros y cinco Glorias, en honor a las cinco Sagradas Llagas de nuestro Señor y después repite con devoción cinco veces esta jaculatoria:
Señor mío Jesucristo, por aquellas cinco Llagas
que por nuestro amor recibiste en la Cruz,
socorre a tus siervos redimidos con tu preciosísima Sangre;
en la Llaga del costado, mi Dios y Señor,
yo quisiera entrar y beber de tu Sangre
para no pecar más ni olvidarme de Ti jamás. Amén.
La oración y los rezos indicados, junto a la jaculatoria, tienes que hacerlos cinco días seguidos. Cada día repite tu petición y no pierdas la esperanza de recibir lo que solicitas, confía en Cristo Jesús, que es el camino hacia Dios Padre Eterno y nuestro más poderoso intercesor ante Él.
OTRAS ORACIONES QUE TE PUEDEN INTERESAR:
No hay comentarios:
Publicar un comentario