Oh santo milagroso y fiel intercesor nuestro, a ti acudo,
ante ti llego esperando tus bendiciones y auxilio,
esperando ayuda en la situación en que me encuentro,
pues tú eres el mejor protector y buen amigo
y nadie queda sin ser escuchado cuando ante ti clama,
nadie se siente abandonado ni excluido en la tierra
cuando te pide amparo con esperanza y confianza.