Si quieres obtener todo lo que necesitas para mejorar tu actual situación acude a estos santos seres mensajeros de Dios y grandes mediadores nuestros, que nos rodean y desean ser nuestros compañeros, los Ángeles y Arcángeles.
Pídeles te abran los caminos, te protejan y auxilien en toda ocasión, no dejes de llamarlos cuando precises su presencia en tu vida pues ellos está siempre dispuestos a ayudarte.
Acude a ellos con confianza, invócalos para que te cubran con su celestial presencia y haz esta oración con cierta frecuencia, una vez al mes o cada dos meses.
ORACIÓN INICIAL DE PETICIÓNOh Ángeles y Arcángeles celestiales, Soberanos Espíritus,
quisiera agradecer todos vuestros cuidados y desvelos
que día tras día, momento a momento me ofrecéis,
pero sé que no puedo corresponder a vuestro amor
con igual cantidad de amor, pues el vuestro es inmenso,
y yo no podré jamás pagar ni reconocer todo lo que me dais,
recibid pues mis afectos y agradecimiento de corazón
por todos los servicios que me habéis prestado
y por las muchas mercedes que aun me quedan por recibir.
Guiadme para que no camine a ciegas en los peligros,
alumbradme para que mis pies no tropiecen en la oscuridad,
llevadme de la mano para que no me pierda ni confunda,
aconsejadme sabiamente cuando no sepa como actuar,
defendedme para que esté libre y a salvo de cualquier maldad
y cubridme con vuestras alas para que tenga refugio
cuando me sienta triste y no pueda soportar las cargas.
Vosotros que me tenéis presente en toda ocasión
y que sabéis todo lo que me preocupa y angustia,
orad y pedid al Señor por mí, que yo experimente su auxilio
y pueda gozar de salud del cuerpo y alma,
que reciba por vuestra asistencia todo lo necesario
para tener una vida buena y feliz llena de adelantos.
Pedid también por el perdón de mis pecados y faltas
y haced que ame a Dios con toda mi alma y sentimiento,
que sepa bendecirlo y contar sus maravillas
y busque en todas las cosas su mayor gloria. Así sea.
MUY EFECTIVA ORACIÓN ABRE CAMINOS
Ángeles y Arcángeles, amados seres de luz,
junto a los Tronos y las Dominaciones,
los Principados y Poderes. Virtudes de los Cielos,
Querubines y Serafines, dad gloria a Dios,
no dejéis de glorificar al Señor por siempre.
¡Alaben al Señor todos sus ejércitos, sus Ángeles y Santos,
¡Alaben al Señor todos sus ejércitos, sus Ángeles y Santos,
siervos que con diligente entrega cumplen su voluntad!
Santo Ángel que confortaste a Jesucristo nuestro Señor,
Santo Ángel que confortaste a Jesucristo nuestro Señor,
ven en nuestro auxilio y confórtanos a nosotros también.
¡Ven no tardes! Date prisa en socorrernos.
¡Oh Dios misericordioso y compasivo!
que en un orden prodigioso has creado a estos seres
para que nos socorran a los que estamos aquí,
que por tu providencia te has complacido
en mandar a tus maravillosos Ángeles y Arcángeles
para que nos ayuden y protejan con sumo cuidado,
para que nos ayuden y protejan con sumo cuidado,
nos defiendan siempre ante peligros y males,
nos custodien, nos guíen, nos enseñen,
nos custodien, nos guíen, nos enseñen,
y disfrutemos de su dichosa y provechosa compañía.
¡Señor, Dios de toda bondad! Señor Padre Celestial,
Tu que siempre nos das más de lo que pedimos,
te suplicamos visites nuestro hogar
¡Señor, Dios de toda bondad! Señor Padre Celestial,
Tu que siempre nos das más de lo que pedimos,
te suplicamos visites nuestro hogar
y alejes todas las trampas y astucias del enemigo.
Que tus Ángeles y Arcángeles habiten nuestra casa
Que tus Ángeles y Arcángeles habiten nuestra casa
nos limpien y purifiquen nuestro alrededor y nos traigan paz,
mándalos para que nos concedan su valiosa mediación,
nos atiendan cuando estamos faltos de fortaleza
y nos regalen su dulcísimo y efectivo consuelo
en las tristezas, en las enfermedades, agobios y dificultades
para que nos traigan todo lo que precisamos,
y sobre todo que nos despejen y abran nuestros caminos
y así podamos avanzar, progresar y triunfar en nuestras vidas
tanto en el amor, como en el trabajo, la salud, el bienestar.
Oh Señor, que tu bendición siempre nos acompañe.
¡Todopoderoso y eterno Dios, Padre mío misericordioso!
en tu amable providencia has designado a todos,
desde el día de su nacimiento un ángel particular,
para que sea custodio de su cuerpo y alma;
concédeme amar y honrar al mío de tal modo que,
protegido por sus gracias, y con su inestimable ayuda,
merezca contemplar en su compañía,
y la de todos los Ejércitos Celestiales,
la gloria de tu rostro en el Reino celestial.
Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén. +
mándalos para que nos concedan su valiosa mediación,
nos atiendan cuando estamos faltos de fortaleza
y nos regalen su dulcísimo y efectivo consuelo
en las tristezas, en las enfermedades, agobios y dificultades
para que nos traigan todo lo que precisamos,
y sobre todo que nos despejen y abran nuestros caminos
y así podamos avanzar, progresar y triunfar en nuestras vidas
tanto en el amor, como en el trabajo, la salud, el bienestar.
Oh Señor, que tu bendición siempre nos acompañe.
¡Todopoderoso y eterno Dios, Padre mío misericordioso!
en tu amable providencia has designado a todos,
desde el día de su nacimiento un ángel particular,
para que sea custodio de su cuerpo y alma;
concédeme amar y honrar al mío de tal modo que,
protegido por sus gracias, y con su inestimable ayuda,
merezca contemplar en su compañía,
y la de todos los Ejércitos Celestiales,
la gloria de tu rostro en el Reino celestial.
Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén. +
Pide ahora lo que en especial deseas conseguir y reza a Dios con devoción tres Padrenuestros y tres Glorias.
Para que no te falte nunca la asistencia de los Ángeles y Arcángeles acuérdate más a menudo de ellos, habla con ellos y cuéntales tus preocupaciones, y, para que tus caminos estén en cualquier ocasión abiertos a todo lo mejor, y, para que no te falte su saludable y poderosa protección, repite durante tres días seguidos las oraciones y los rezos indicados.
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