De Jesús hemos recibido lo que tenemos y de Jesús esperamos recibir lo que nos falta y cuanto mas le pedimos más obtenemos.
Solicita con recogimiento al Niño Jesús, que siempre es bueno y comprensivo, te brinde su misericordia y te conceda sin tardanza los favores que pides mediante esta oración:
Oh Niñito Jesús, Dios amoroso y bendito,
Príncipe de la Paz y Señor de los Cielos y tierra,
hoy me dirijo a Ti con mi corazón rebosante de fe
solicitando tus bondades y bendiciones.